Si tienes algo de dinero ahorrado y no sabes qué hacer con él, puede que este depósito de ING sea justo lo que buscas. Hasta el 31 de diciembre, puedes contratar su depósito a plazo fijo con un interesante rendimiento del 2,75% TAE a cuatro meses. Es una de esas ofertas que no aparecen todos los días, especialmente ahora que los tipos de interés comienzan a bajar.
Pero, como siempre, no todo es tan simple. Vamos a analizar si esta opción merece realmente la pena y qué debes tener en cuenta antes de dar el paso.
Lo que hace especial este depósito
Primero, lo básico. Este depósito está disponible tanto para nuevos clientes como para quienes ya trabajan con ING. Sin embargo, hay una condición: el dinero que ingreses tiene que ser nuevo, es decir, debe venir de otra entidad y aumentar el saldo que tienes en el banco.
Otra ventaja es que no necesitas una gran cantidad para empezar. Desde el primer euro puedes contratarlo, algo que no siempre ocurre con este tipo de productos. Ahora bien, el máximo permitido es de 100.000 euros, que coincide con la cantidad asegurada por el Fondo de Garantía de Depósitos español.
Vamos a los números. Si decides invertir la cantidad máxima, puedes obtener unos 920 euros brutos en solo cuatro meses. Si tu inversión es menor, las cifras serían algo así:
- 50.000 euros: Ganarías unos 460 euros brutos.
- 10.000 euros: Tus beneficios rondarían los 90 euros brutos.
No está nada mal, ¿verdad? Es una opción rápida, segura y sin complicaciones para conseguir un ingreso extra.
El punto débil: ¿qué pasa después?
Aquí viene la parte menos atractiva. Al ser un depósito a corto plazo, tu dinero estará rentabilizándose solo durante cuatro meses. Cuando venza, tendrás que buscar otra opción para seguir sacándole partido, y ahí es donde las cosas pueden complicarse.
¿Por qué? Porque todo indica que los tipos de interés seguirán bajando. Esto significa que es probable que las ofertas futuras sean menos interesantes. Los bancos ajustan sus depósitos a lo que marca el Banco Central Europeo, y si las tasas caen, las rentabilidades también lo harán.
Si no quieres lidiar con esta incertidumbre, podrías considerar depósitos a largo plazo, como de un año o más. Algunas entidades ofrecen rendimientos similares, cerca del 3% TAE, pero con la ventaja de garantizar esa tasa durante más tiempo. Claro, el inconveniente aquí es que tu dinero quedará «bloqueado» durante ese periodo, lo que no siempre es ideal si necesitas liquidez.
¿Es este depósito para ti?
La respuesta depende de tus objetivos. Si buscas algo a corto plazo, sin riesgos y con un rendimiento claro, este depósito de ING puede ser una muy buena opción. Es perfecto para quienes tienen ahorros que no planean usar en los próximos meses y quieren sacarles algo de provecho sin complicarse.
Sin embargo, si prefieres una estrategia más estable a largo plazo o te preocupa que las ofertas futuras sean peores, tal vez deberías explorar otras alternativas.
En cualquier caso, recuerda que el plazo para contratar este producto termina el 31 de diciembre. Si crees que es lo que necesitas, no lo dejes pasar. A veces, las mejores oportunidades son las más simples.
