Algunos de los mercados más importantes y en los que más inversores confían es en el mercado de las commodities, o dicho de otra manera las materias primas y productos básicos, con los que también se pueden obtener importantes ganancias. Son productos homogéneos como trigo, aceite, petróleo, judías o maíz. Es habitual escuchar hablar sobre algunas de ellas como el petróleo.
Esta materia prima es una de las que más influye en el mercado, y también en las divisas. Durante estos últimos meses hemos podido ver este efecto con las tensiones políticas de Rusia y con la fuerte volatilidad de su moneda, el rublo ruso. También destacar el oro, inversión refugio por excelencia, donde hemos visto una caída importante de precio durante los últimos años. Pero a pesar de la incertidumbre que crean estos mercados, siempre es posible «pronosticar» su evolución gracias a la relación que tiene con las divisas, especialmente el dólar.
Por ejemplo, en los siguiente gráficos de Morgan Stanley podemos verlo. En el primero de ellos vemos como el precio del crudo ha bajado en prácticamente todos los países, excepto en Rusia, dónde parece que ha sido mucho menor. Sin embargo esto no es así, ya que el rublo ruso también se ha derrumbado, de ahí que la caída sea mucho menos pronunciada respecto a otras divisas que no lo han hecho. El nivel del oro, maíz, judías, trigo o cobre, también ha bajado de forma generalizada, aunque no con la misma fuerza. Podemos destacar la línea roja correspondiente al rublo ruso, un país que tiene tensiones políticas.
Estas dinámicas de las commodities son algo complicadas de ver, aunque los inversores siguen confiando en estos mercados. Una de las últimas noticias sobre estos mercados, es la fuerte caída de precios en los países de America del Sur. El FMI ya ha anunciado que tomará medidas después de analizar el impacto de este cambio.