Como sabemos, los bancos nos ofrecen mejores o peores condiciones en función de lo que llamaríamos puntaje de crédito. Desde nuestro banco, poseen toda la información sobre límites en las tarjetas, ingresos, gastos, deudas, préstamos, hipotecas, y todo lo relacionado con nuestras finanzas. Con todo ello consiguen llegar a nuestra solvencia, y nuestro nivel de «crédito».
Este nivel variará en función de los productos contratados, y la mejora de esta situación nos promocionará mejores tipos de interés y mejores condiciones en nuevos productos, e incluso la mejora en los que ya tenemos con la negociación de condiciones. Pero, ¿cómo podemos mejorar esto? ¿Hay formas para tener mejores condiciones en el banco?
Aunque muchos crean que desde el banco no van a ofrecernos mejores condiciones si lo pedimos, lo cierto es que en muchas ocasiones, al cambiar nuestra situación financiera, también es posible cambiar las condiciones de algunos productos, como los tipos de interés o los límites de crédito.
El nivel de crédito consiste en la relación que existe entre lo que sería nuestro crédito total disponible y las deudas que tenemos, es decir, un ratio de nuestra capacidad de pago. A simple vista puede parecer sencillo, pero no olvidemos que por ejemplo las tarjetas de crédito que aún no hemos pagado, también supondrían una deuda.
- Bajar la deuda. Este punto es obvio, pero si queremos pedir algún crédito o nuevo préstamo, podemos intentar bajar esta deuda, aunque sea un poco para poder bajar nuestro nivel de crédito al menos momentáneamente.
- Pedir más límite de crédito. En esta situación nos proporcionará mayor crédito total disponible, algo que también bajará nuestra puntuación de crédito. Si en lugar de tener un límite de 5.000 tenemos uno de 10.000 euros (aunque no lleguemos a usarlo) supondrá una mejor proporción en neutra tasa.
- Si tenemos una deuda de tarjetas de crédito, quizás pedir otra no sea la mejor opción, pero en algunas ocasiones, si pedimos una tarjeta adecuada podemos transferir parte de la deuda y reducir en parte los intereses a pagar.
- En nuestro nivel de crédito también influye el historial. Luego si somos nuevos en el crédito, este no será muy alto; tendremos que esperara y mantener equilibrados nuestros créditos para que esto suponga una mejora.
- Obtener tarjetas adecuadas, por ejemplo para pagar la gasolina o determinados productos, que nos aporten ventajas extra que al pagar con una tarjeta normal no se obtienen.
- Por último, establecer alarmas y alertas de pago, para no retrasarnos en los mismos, ya que esto también empeorará nuestra situación para con el banco. Recordemos que todo se queda reflejado.
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